Por: Lic. Rigoberto González, Economista

La pandemia por Coronavirus ha cambiado los hábitos de consumo y los métodos de compra de los consumidores panameños. En medio de las restricciones a la movilidad, las personas han optado por consumir productos que no se compraban con frecuencia.

SUPERMERCADOS

Las cadenas de supermercados no se dan abasto para atender la cantidad de pedidos que reciben en línea, la nueva forma que prefieren los clientes para hacer supermercado ante la cuarentena que les obliga a no salir de casa. Una tarea muy poco desarrollada en Panamá anteriormente, pero que el COVID-19 aceleró en su implementación.

Para poder tratar de satisfacer la demanda, los supermercados han redistribuido al personal que organiza los pedidos, incrementan la cantidad de camiones de reparto, y agilizan la reposición de productos. Un eslabón importante en esta cadena son las empresas de mensajería o ‘delivery’.

DELIVERYS

Las plataformas que ofrecen estos servicios, a cambio de una comisión que paga el vendedor o el cliente, ahora están abarcando otras partes del mercado como los supermercados. Esto es parte de los cambios obligados en el estado de emergencia y cuarentena en que el Coronavirus (COVID-19) tiene al país. La crisis sanitaria ha hecho que los comercios en Panamá tengan que reinventarse para entregar mercancías.

El comportamiento del consumidor en estas plataformas se transformó de manera significativa porque los comercios que más órdenes generan ahora son los supermercados, fruterías y tiendas de conveniencia que anteriormente representaban una venta mínima dentro de la torta de negocios.

Estas empresas ante la constante demanda han optado por colocar personal dentro de los supermercados para poder brindar soporte a estos locales comerciales y suplir la demanda. Más cadenas de supermercados y comercios de bienes se han afiliado a las plataformas recientemente porque ven en estas un desahogo como canal de venta online en vez de estar en la fila del supermercado.

TENDENCIAS

Dimas Gimeno, fundador y presidente ejecutivo de Skintelligence, en su artículo “Retail y Covid-19: la transformación se acelera” señala que aunque aún es pronto para definir con precisión lo que va a ocurrir, ya se pueden entrever algunas tendencias en lo que se refiere a los cambios en las pautas de consumo.

Gimeno destaca que se incentivará el consumo del producto nacional, del llamado kilómetro cero, del mercado pequeño. Lo más probable es que veamos una revitalización de los mercados de abastos en detrimento de las superficies de distribución de tamaño medio, y cómo la entrega a domicilio potenciará el consumo del producto local.

Continua Gimeno exponiendo que un ejemplo de esta adaptación lo tenemos hoy en muchas tiendas de barrio, que han sabido agruparse para llevar la cesta de la compra a la propia casa de las personas.

CONSUMO DE ALIMENTOS EN LOS HOGARES PANAMEÑOS 

Entre las frutas y legumbres, el aguacate, la papa y zanahoria son algunos de los productos que registran mayor demanda en los servicios de entrega a domicilio. En el caso de las frutas, las de mayor demanda son las naranjas y los limones, sin embargo, también se consume mucho las de temporada.

Tomando en cuenta el periodo 2010 – 2015, última información disponible, el consumo de los hogares relacionado con la adquisición de bienes tangibles es diversa y alcanzó un 56.4% del total; el resto del consumo abarca servicios como los de electricidad y agua, hoteles y restaurantes, financieros, inmobiliarios, entre otros.

Dentro de estos bienes sujetos a comercialización, el grupo predominante fue el de alimentos y bebidas (42.3% del total), mayoritariamente por productos cárnicos y pescado, productos de molinería, bebidas, lácteos, frutas, legumbres, aceites y grasas, entre otros.

Dentro de la estructura de la Canasta Básica de los Alimentos (CBA) elaborada por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), las carnes abarcan el 31.29%, los cereales el 17.1%, los vegetales y verduras el 16% y los lácteos el 10.4%, entre otros.

La Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (ACODECO) en su informe sobre la evolución del costo promedio de los rubros de la canasta básica de alimentos al mes de marzo del 2020 señala que las carnes promedian un costo de $93.21, los cereales un $45.25, los lácteos $36.53, Vegetales y verduras $23.81, las frutas $18.23, entre otros.

PRECIOS DE LOS ALIMENTOS

En el Índice de Precios Nacional Urbano estimado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Base 2013=100) la ponderación o peso que los alimentos y bebidas tienen en su cálculo es de 22.0%. Es decir, la población de las ciudades a nivel nacional destina una cuarta parte de su gasto a la compra de alimentos.